Passivhaus: Casas pasivas

Passivhaus es una edificación diseñada para ahorrar 3/4 partes de las necesidades energéticas de la vivienda.

Necesitan muy poca energía suplementaria para mantener una temperatura constante y confortable tanto en invierno como en verano.

Este pequeño aporte se puede suplir con energías renovables de forma pasiva, convirtiéndose en una construcción de muy bajo coste energético.

 

Un correcto estudio bioclimático de la mejor orientación posible, es el primer paso para optimizar y aprovechar de forma pasiva los recursos naturales.

El aislamiento térmico tiene que ser de un grosor suficiente para proteger la vivienda del frío/calor y mantener una temperatura comfortable constante.

Una continuidad en el aislamiento asegura la hermeticidad, eliminando las corrientes de aire y la propagación de ruido desde el exterior al interior.

La calidad, la posición y el diseño con cámaras de aire y perfiles aislantes de las ventanas, son imprescindibles para evitar la pérdida de temperatura. 

La ventilación mecánica con recuperación del calor es el pulmón de las Passivhaus. Una ventilación filtrada y continuada sin perder la temperatura. 

 ¿Qué es una Casa Pasiva?

Passive House es un edificio de bajo consumo energético verdaderamente eficiente, cómodo y asequible al mismo tiempo

Las casas pasivas permiten un ahorro de energía relacionado con la calefacción y la refrigeración de hasta un 90 % y más del 75 % en comparación con las nuevas construcciones. Las casas pasivas usan menos de 1,5 m3 de gas para calentar un metro cuadrado de espacio habitable durante un año. Se han demostrado grandes ahorros de energía en climas cálidos como Mallorca, ya que hacen un uso eficiente del sol, las fuentes de calor internas y la recuperación de calor, lo que hace que los sistemas de calefacción convencionales sean innecesarios incluso durante los inviernos más fríos.

 

Durante los meses más cálidos, hacen uso de técnicas de enfriamiento pasivo, como sombreado estratégico para mantenerse cómodamente fresco y con un alto nivel de confort. Las temperaturas de la superficie interna varían poco de las temperaturas del aire interior, incluso frente a temperaturas exteriores extremas. Las ventanas especiales y un aislamiento adecuado mantiene el calor deseado en la casa, o el calor no deseado afuera.
Un sistema de ventilación suministra imperceptiblemente aire fresco constante, lo que permite una calidad de aire superior sin corrientes de aire desagradables. Una unidad de recuperación de calor altamente eficiente permite reutilizar el calor contenido en el aire de escape.